La decisión de postergar el paro de actividades previsto en una primera instancia para el 25 de julio ha dejado al descubierto uno de los problemas que no se hacían visibles en el exterior de la central obrera uruguaya.
Se trata de las mismas diferencias que llevaron a conformar otra corriente dentro del PIT CNT.
La Mesa Representativa del PIT-CNT decidió horas atrás, por 32 votos a favor y 21 en contra, postergar hasta el 22 de agosto el paro general de 24 horas que estaba previsto originalmente para el 25 de julio.
De esta forma, salió adelante la postura que defendía el presidente de la central sindical, Fernando Pereira, del grupo Articulación, que entendía que se habían registrado algunos avances en la discusión de la Rendición de Cuentas y que no se justificaba un paro general tan pronto.
Fue derrotada la posición de la corriente “En Lucha” integrada por sindicatos estatales, municipales de Montevideo, sindicato de la bebida, que no quería una postergación y que entendía que se debía profundizar la lucha sindical.
El debate duró un par de horas y Pereira y el presidente del sindicato de Antel, el comunista Gabriel Molina, defendieron la posición de postergar el paro que fue acompañada por varios plenarios del interior del país. Las discrepancias están dadas en la nueva fecha fijada.
Algunos Detalles
De acuerdo a lo que se pudo conocer, tras la reunión del presidente del Pit, Fernando Pereira, y otros dirigentes con el presidente de la República Tabaré Vázquez, y la obtención de algunas mejoras para la educación y sobre todo para la salud, la máxima figura de la central planteó la idea de postergar la medida de lucha para el 22 de agosto.
Se confirmó que este planteo fue avalado por la corriente sindical del Partido Comunista y por “Articulación” grupo al que pertenece Pereira, que están aliados.
Sin embargo, varios sindicatos se oponen a este cambio.
La nueva corriente denominada “En Lucha”, liderada por José López dejó en claro dejó que si bien está dispuesta a analizar una postergación considera demasiado tardía la fecha y plantearon que se concretara antes del 15 del próximo mes.
Sus integrantes explicaron que si bien en la Rendición de Cuentas hubo algunas mejoras las mismas no contemplan las necesidades de todos los trabajadores y que el paro del 25 daba pie a una serie de movilizaciones pero finalmente no fue así o al menos no lo es.
Agregaron que los lineamientos para los Consejos de Salarios privados son insuficientes y que en los pocos convenios que ya se están negociando no hay avances.
La corriente de Pereira en tanto había manifestado en su momento que el paro del pasado 28 de junio arrojó buenos resultados.
Se sostuvo que en la ocasión se “levantaron banderas que son imprescindibles para el desarrollo del Uruguay, como son la educación de calidad y una salud pública que contemple la creación de cargos y mejoras salariales. A esto se le suma la necesidad de mejorar el tema de la minoridad y de la vivienda”, remarcó. Afirmó al tiempo que producto de las movilizaciones, de las reuniones con el presidente de la República, Tabaré Vázquez, y la negociación en el sector público se lograron algunos cambios, entre los que destacó el pre acuerdo entre ASSE y el Poder Ejecutivo, entre el INAU y el SIRPA, y la contratación de 350 auxiliares de servicio que pasarán a ser funcionarias del organismo.